jueves, mayo 19, 2005

just talking

SER PADRES V/S CARRETE
25 DE MARZO, 2005


Nos enfrascamos en una discusión que nunca llega a un final como la gente. Otra vez se dio vuelta la tortilla y yo quedé como la malvada de la película. Quiero dejar en claro que el hecho de querer salir a carretear no me convierte en una mala madre, ni siquiera desconsiderada. Talvez aún me falta mucho para lograr ese dejo que caracteriza a todas las madres, talvez aún soy muy egoísta y pienso en lo que me gustaría hacer. Creo que la gran diferencia entre tu y yo es que yo soy capaz de reprimir esas ganas. Te dije que también me gusta la noche… creo que nunca te he dicho que me han dado ganas de salir corriendo creyendo que no lo estoy haciendo bien y que no soy capaz, pero miro a la hija y me doy cuenta de que cualquier sacrificio es poco. A diferencia de ti que no puedes, mejor dicho no quieres, abandonar ciertas cosas, en realidad es sólo una: el carrete.
Puede que para los hombres sea más difícil adaptarse a toda esta nueva situación y estilo de vida… talvez por eso somos las mujeres las que tenemos los hijos y no ustedes. Me imagino que si le comento lo que pasó esta noche a cualquier hombre me va a decir que estoy exagerando y que un hombre necesita espacio. Totalmente de acuerdo con lo del espacio pero ¿y el respeto por la pareja? ¿El respeto por la familia? ¿Será verdad que la maternidad me ha vuelto una mujer amargada y llena de recriminaciones? Yo no me siento amargada. Si es cierto que siento que muchas cosas cambiaron en mí desde el embarazo, pero creo que la amargura y las recriminaciones no son parte de mí. La Isidora se ha vuelto mi vida. Doy gracias a Dios todos los días por este angelito que me envió, pero debo reconocer que sé que con su llegada hay muchas cosas que tuve que abandonar y otras cosas de las que tengo que hacerme cargo todos los días. Como dicen por ahí “uno es mamá las 24 horas del día”, incluso ahora mientras escribo sigo siendo mamá. La Isi esta en su cuna y estoy pensando y escribiendo sobre ella. Ella le ha dado otro significado a mi vida y me ha llenado de nuevos desafíos y sueños.
Definitivamente para los hombres es muy fácil decir que “me encanta la noche, me gusta el carrete” total un bebé no depende de ellos 100 por ciento… para los hombres es fácil ser padres y dejar de serlo en fracción de segundos… sólo tienen que acordarse, el resto viene sólo; los regaloneos y todo eso. Definitivamente, cada día entiendo mejor por que somos las mujeres las que tenemos el privilegio y el regalo de traer personitas a este mundo que a veces esta de cabeza, pero es nuestro mundo y no hay más.